Paseo en globo por Ronda: la única forma de ver el Tajo desde las alturas

Es uno de los rincones de Málaga que más embelesa a quienes vienen a pasar unos días de vacaciones en la provincia. La romántica Ronda , con sus edificios históricos, el marco incomparable de su serranía y el impresionante Tajo sobre el río Guadalevín atrae desde hace siglos a gentes de todo el mundo que quedan cautivadas por su magia. Un paseo por sus calles y plazas es suficiente para constatar la rica historia de una ciudad en la que distintas civilizaciones dejaron huella y que hoy puede contemplarse desde la perspectiva única que ofrecen los globos aerostáticos . De mayo a enero es la temporada ideal para disfrutar de esta experiencia única que solo se puede encontrar en puntos muy concretos de la geografía andaluza. Ronda es probablemente uno de los mejores destinos para volar por primera vez. Por las características de la ciudad y por el buen tiempo del que goza la provincia de Málaga durante todo el año. En el paseo será difícil elegir hacia donde dirigir la mirada. Si al entorno natural de la ciudad, salpicada de valles y rodeada por las sierras de las Nieves, Grazalema y la propia Serranía de Ronda , o al trazado y patrimonio arquitectónico que se extiende a nuestros pies. El viento, no obstante, es caprichoso. Y si bien el recorrido podría discurrir sobre el casco antiguo de la ciudad, con sus iglesias barrocas, la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería o los puentes que salvan los casi 100 metros de caída del Tajo, también podría dirigir el globo hacia las ruinas de Acinipo y su magnífico teatro romano que sobresale en los valles de Ronda la Vieja. Los vuelos en globo se realizan al amanecer , a primera hora de la mañana, ya que es el momento más favorable y seguro para poder fletar el aparato dado que las corrientes térmicas son más estables. El madrugón merecerá la pena solo por ver como el sol despunta sobre las montañas y empieza a reflejarse en el blanco de las fachadas encaladas. Probablemente, el desfiladero excavado por el río, fortaleza natural para la villa, es uno de los principales atractivos de Ronda y la panorámica más buscada. Ya sea con los pies en la tierra o desde las alturas. También lo es el Puente Nuevo y sus imponentes arcos diseñados por José Martín de Aldehuela. A escasos metros, el albero del coso rondeño captará la atención de los pasajeros. La Real Maestranza de Caballería , inaugurada en 1785 y declarada Bien de Interés Cultural en 1993 , es una pieza central del patrimonio histórico de la ciudad. No solo es un símbolo de la tradición taurina, sino también un monumento arquitectónico de gran relevancia. Aunque el paseo por la historia puede hacerse sin salir del centro, gracias a las murallas y puertas árabes salpicadas por la villa, la arquitectura mudéjar, el estilo gótico tardío y del renacimiento de algunos de sus palacios, el esplendor dieciochesco fue la continuación de una herencia que se extiende a lo largo de los siglos. Por el entorno de Ronda han pasado celtas, iberos, fenicios, visigodos o musulmanes, pero fueron los romanos quienes dejaron en este enclave próximo a la Sierra de las Nieves uno de los yacimientos arqueológicos más hermosos de Andalucía. La ciudad de Acinipo con su teatro, es uno de los mejor conservados de la Hispania romana , a casi 1.000 metros sobre el nivel del mar y escasos 20 kilómetros del casco urbano de la ciudad. Todos estos y muchos otros rincones formarán parte de una ruta que ofrecen empresas como Globotur por 195 euros y que estará sujeta al azar . Lo importante es no tener vértigo, subir y dejar que el viento marque la próxima parada.