Blanqueo de capitales: ¿por qué es una oportunidad y cómo sacarle provecho?
Un nuevo blanqueo asoma en puerta. Haciendo un poco de historia, desde la vuelta a la democracia, estamos en presencia del séptimo blanqueo, llamado con diferentes nombres según la presidencia: Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Cristina Kirchner en dos ocasiones (una de las cuáles fue sólo a través de los CEDINES como instrumento), Mauricio Macri, Alberto Fernández y finalmente Javier Milei. Todos diseñaron sinceramientos fiscales para atacar la ‘fuga de capitales', es decir, recuperar los dólares que salen del país o del sistema financiero nacional. En todas las ocasiones el objetivo fue aumentar la recaudación e incrementar las reservas del Banco Central. Los únicos presidentes que no fomentaron un blanqueo fueron Fernando De La Rúa y Néstor Kirchner (éste último básicamente porque mantenía el doble superávit, fiscal y comercial).
Blanqueo: ¿por qué esta vez es diferente?
Repasemos algunas características:
La manifestación de adhesión al régimen podrá efectuarse hasta el 31 de marzo de 2025. El blanqueo se dirige tanto a los residentes como a todos los argentinos que mudaron su residencia fiscal a otro país, y hoy pueden decidir su regreso al amparo de este proceso (es una novedad distintiva). Con relación al blanqueo de Mauricio Macri (tasa del 10% para montos superiores a u$s23.000), éste es bastante más barato, incluso es a tasa 0% si se participa en la primera etapa y el monto es inferior a u$s100.000.
Etapa 1: hasta el 30 de septiembre de 2024, se abona una alícuota del 5% sobre el excedente de u$s100.000
Etapa 2: hasta el 31 de diciembre de 2024, la alícuota es del 10%.
Etapa 3: hasta el 31 de marzo de 2025, la alícuota asciende al 15%.
Visto así, es una excelente oportunidad ya que el contribuyente no sólo NO pagará impuestos o multas, sino todo lo contrario, podrá invertir y tener una gestión activa de su cartera. Con un equipo de de Wealth Management se puede invertir en activos financieros de acuerdo con el perfil y objetivos de cada inversor y generar una rentabilidad en su cartera que rondaría el 8% anual en dólares para inversiones relativamente conservadoras (siempre hablando de Argentina).
¿Cómo se puede sacar provecho con el blanqueo de activos?
Ante la volatilidad de las últimas semanas y en vistas de una muy probable baja de tasas en EE.UU, se puede invertir en un Fondo Renta Dólar, que son fondos que administran bonos corporativos de Latam.
Por otro lado, se puede invertir en Obligaciones Negociables relacionadas al sector energético y algo de Bopreales.
Quienes quieran aprovechar la toma de ganancias en las acciones argentinas desde mayo, se sugiere armar una cartera diversificada y a largo plazo, ya que, si se mantienen las señales de progreso en la normalización de variables, la tendencia debería ser positiva.
La normativa permite invertir en acciones, bonos soberanos, obligaciones negociables, dólar MEP, e incluso en fondos comunes de inversión (que tendrán series especiales para tal fin), pero no permite invertir en Cedears y tampoco comprar cables para mandarlos al exterior.
Algo importante a tener en cuenta es que una vez que los fondos ingresan a un bróker, el cliente tiene 10 días para invertir los fondos, caso contrario las ALYCS están obligadas a devolverlos a la cuenta (CERA) del banco originante.
Blanqueo: ¿será un éxito?
La norma también reglamenta la posibilidad de adelantar el pago de Bienes Personales de 2023 a 2027 con una alícuota de 0,45% por año, lo que exime al contribuyente de presentar la declaración jurada hasta 2028 y le otorga estabilidad fiscal, es decir, no se podrán cobrar mayores alícuotas durante ese periodo sobre su patrimonio.
Por su parte, para los contribuyentes cumplidores la normativa prevé una reducción de 0,5% de la alícuota del impuesto sobre los bienes personales para los períodos 2023, 2024 y 2025 para aquellos contribuyentes que hayan cumplido con sus declaraciones y pagos en 2020, 2021 y 2022.
Es la última oportunidad hasta 2038. La ley de Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes establece que quienes adhieran al blanqueo no van a poder inscribirse en otros regímenes similares hasta el 31 de diciembre de 2038 (con lo cual incentivan la participación).
Es difícil determinar cuánto dinero podría ingresar al blanqueo, pero el Gobierno está estimando un monto cercano a los u$s40 mil millones, que generarían aproximadamente una recaudación de u$s 2.000 millones para el fisco.
El de Macri fue el mayor de la historia y el más grande del mundo, llegando a exteriorizar unos u$s116 mil millones.
Dos factores a tener en cuenta y que son muy influyentes en la toma de decisión:
- Positiva: la confianza del contribuyente al Gobierno (que por el momento la tiene)
- Negativa: la percepción del riesgo. La desconfianza a futuros gobiernos que de alguna manera disfracen nuevas leyes recaudatorias y modifiquen en el futuro la situación regularizada.