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Июль
2024

La íntima medalla de Nada Hafez

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Abc.es 
Nada Hafez saltó a la pista del Grand Palais, cogió el sable, se colocó frente a la americana Elizabeth Tartakovski y se ajustó la máscara. El combate acabó con la victoria de la tiradora egipcia (15-13), que se colocó en octavos de final. Nada especial. Un duelo más, un triunfo más, una jornada más en los Juegos de París 2024 . Sin embargo, al terminar la disputa, cuando Nada se quitó el casco, apenas podía sujetar las lágrimas. Sonreía, lloraba, volvía a sonreír. Unas horas después, colocaba una de esas emocionantes fotografías en Instagram y escribía en inglés: «Lo que os parecían dos personas en la pedana éramos en realidad tres. Yo, mi oponente y mi pequeño bebé , a punto de llegar a este mundo». Nada Hafez había competido embarazada de siete meses. «Estos Juegos han sido diferentes. Soy tres veces olímpica, pero en esta ocasión llevo a un pequeño olímpico conmigo». Nada Hafez (El Cairo, 1997) no solo maneja el sable con soltura. También ha sido campeona de gimnasia en su país y se ha graduado en Medicina en la Universidad cairota. Es especialista en patología clínica. Pero confiesa que París 2024 le ha supuesto su mayor desafío: «Mi bebé y yo hemos tenido nuestra buena ración de retos, tanto físicos como mentales. La montaña rusa del embarazo ya tiene lo suyo, pero luchar para mantener el equilibrio entre la vida y el deporte ha sido extenuante, aunque ha merecido la pena». Confesaba que escribía ese post para gritar al mundo su orgullo por haberse clasificado en su estado para octavos de final. También agradecía la confianza que le había mostrado su familia y en especial su marido, el cirujano Ibrahim Ibab, con el que se casó en mayo de 2023. La esgrimista egipcia perdió su siguiente combate contra la coreana Jeon Hayoung (15-7). Nadie, sin embargo, le podrá quitar su íntima medalla a Nada Hafez. Cuando el pequeño o la pequeña nazca, su madre le podrá contar la increíble historia de aquella tarde parisina en la que ambos ganaron un duelo a sable en los opulentos salones del Grand Palais.