La estrella de rock que corre con sus fans antes de los conciertos
La vida de Travis Barker cambió para siempre en 2008, cuando sufrió un grave accidente de avión en el que casi pierde la vida y una pierna. Tenía un 70% del cuerpo afectado por graves quemaduras y los doctores le dijeron que sería difícil que volviera a andar de nuevo... también tocar la batería como en sus mejores días. 16 operaciones y tras 11 semanas ingresado, volvió a salir a la calle y volvió a sentir el placer de andar. Él se tomó las peores previsiones como un reto personal y, a pesar de nunca haberse interesado por el deporte o haber sido un chico atlético, empezó a andar, trotar y correr para demostrarse a sí mismo y al resto del mundo de que era posible recuperarse incluso en su precaria situación.