Por unas Fiestas Patrias más cívicas
Información proveniente de Cajamarca señala que adolescentes que marchaban en el mes patrio requerían atravesar un corredor de fuego como parte del espectáculo. Las líneas de fuego sobre la pista producto de la gasolina colocada ex profeso por una persona, al parecer responsable de la actividad escolar, pudieron originar un daño mayor. Por suerte, el menor afectado logró superar las llamas que amenazaban alcanzar sus prendas.
Se trataba de los festejos del colegio San Ramón, en Cajamarca, en conmemoración de los 142 años de la Batalla de San Pablo, librada el 13 de julio de 1882, correspondiente a la campaña de La Breña.
Es evidente que se requieren protocolos del Ministerio de Educación y de las autoridades regionales para que eviten estos espectáculos con fuego y otros elementos que pueden resultar extremadamente peligrosos. La vida y la salud de los menores no pueden ser expuestas por el sistema educativo, sin que se establezcan criterios y controles.
Esta es una buena ocasión para reflexionar también sobre la necesidad de promover, desde la sociedad, festejos por el aniversario patrio con contenidos más cívicos que militares, ya que se trata de una fiesta nacional que debe movilizar al conjunto de la nación.
La lucha por la independencia tuvo actores populares que derrotaron también el yugo español, con sus acciones y decisiones. No fueron solo acciones militares las que construyeron la república peruana. Mujeres como María Parado de Bellido, Micaela Bastidas o peruanos de la talla de José Olaya Balandra o José Gabriel Condorcanqui han ofrecido su vida por la causa de la libertad. Es bueno recordar sus aportes y renovar, en estas fiestas que se inician, los contenidos ciudadanos de nuestra historia, la contribución de las provincias a la lucha libertaria y la participación de las mujeres en estas actividades clandestinas que lograron finalmente la independencia del Perú.
El país de todas las sangres tiene que encontrar una representación más amplia en estas Fiestas Patrias y permitir un reencuentro obligado de las fuerzas no solo militares que hicieron posible nuestra república.