Pacto de Mayo acotado, retaceo a Macri y un próximo paquete de leyes con rumbo fijo
Javier Milei se dispone a avanzar con la "segunda etapa" de su gobierno bajo dos premisas concretas: insistir con el rumbo económico sin cambio alguno y ratificar el "principio de revelación" para dejar expuestos a todos aquellos que no acompañen sus propuestas o se opongan a su estrategia de gobierno.
Este es el espíritu con el que el presidente convocó al Pacto de Mayo para el lunes que viene a la medianoche en Tucumán. Es también la señal que dejó en la última reunión de gabinete donde ratificó el plan económico sin cambios. Y es también la tesitura que se fijó en su pelea frontal contra Mauricio Macri por el reclamo de fondos coparticipables de la Ciudad de Buenos Aires que llegó a la Corte y el líder de PRO ayer reclamó.
Las invitaciones
Ayer, en la Casa Rosada enviaban las invitaciones para la firma del Pacto de Mayo bajo una frase del escritor y poeta Esteban Echeverría que reza: "las glorias colectivas de la revolución son aquellas conquistadas por el heroico esfuerzo de la Nación en la Guerra de la Independencia y por los patriotas de mayo y julio: todas ellas son santas y legítimas".
En la misiva de invitación se exige que todos los que vayan a Tucumán tendrán que "vestir de oscuro" y esperar a que se cumplan las 00:00 del 9 de julio, en la Casa Histórica de Tucumán para que el presidente Milei proceda a firmar junto a un grupo de gobernadores y ante cientos de dirigentes, el esperado Pacto de Mayo, en el que la política se comprometerá a avanzar con 10 políticas de Estado a largo plazo, con el objetivo de terminar con el constante cambio de rumbo del país.
"A los que no vayan se los dejará expuestos y se les impondrá el principio de revelación que sostiene que será la sociedad la que juzga", dijo a El Cronista un funcionario que dialoga a diario con el Presidente. Vuelve el esquema: "Casta versus pueblo".
En el caso de los gobernadores, desde la Casa Rosada dan por hecho que irán los que pertenecen a Juntos por el Cambio: Jorge Macri (Ciudad de Buenos Aires), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Gustavo Valdés (Corrientes), Alfredo Cornejo (Mendoza), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (jujuy), Leandro Zdero (Chaco), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Claudio Poggi (San Luis).
A la vez, esperan que vayan los peronistas e integrantes de partidos independientes como Hugo Passalacqua (Misiones), Rolando Figueroa (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro), Marcelo Orrego (San Juan), Martín Llaryora (Córdoba) y Claudio Vidal (Santa Cruz).
Se da por hecho la ausencia de los gobernadores de las provincias de Buenos Aires, Axel Kicillof; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de La Rioja, Ricardo Quíntela; de Formosa, Gildo Insfrán, y de Tierra del Fuego, Gustavo Melella.
Y en los casos de Raúl Jalil (Catamarca) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero) irán a Tucumán pero no firmarán el Acta de Mayo.
La ofensiva de Macri
No obstante, en el Gobierno están expectantes de los presentes y ausentes. Por empezar, los ex presidentes: Duhalde ya adelantó que no irá y puso la excusa de que antes fue invitado a la cumbre del Mercosur en Paraguay, Alberto Fernández y Cristina Kirchner ni siquiera contestarán y Mauricio Macri tampoco iría a Tucumán y ya adelantó otra batalla contra Milei por la coparticipación porteña.
El caso de Macri es complicado: ayer volvió a objetar a Milei por segunda vez en una semana. Primero fue el lapidario informe de la Fundación Pensar que responde al PRO donde cuestionó el rumbo económico del gobierno. Ahora llegó el reclamo por la coparticipación.
"No tengo dudas de que cumplir los fallos es la voluntad del Presidente, porque todos sabemos que sin instituciones (y no hay instituciones si no se cumplen las reglas), no habrá justicia, ni progreso, ni crecimiento, ni bienestar, ni inversiones", asestó Macri en una definición que puso en jaque a Milei y su ordenamiento de cuentas.
Anoche, en la Casa Rosada había dos bibliotecas divididas: por un lado, aquellos que aseguraban a El Cronista que "habrá que cumplir el fallo de la Corte mal que le pese al Presidente". Otros sectores sostenían el latiguillo de la liturgia libertaria: "No hay plata". Otros se mantenían en silencio. Milei será quien al final del camino tenga que definir.
Gestiones por el Acta de Mayo
Hubo gestiones de algunos gobernadores del PJ para modificar algunos puntos del Acta de Mayo para alcanzar un consenso básico con la Casa Rosada. Pedían cambios en los puntos relacionados con la reforma jubilatoria y precisiones por el uso de recurso naturales de las provincias. También hubo un pedido puntual por incluir temas de producción y desarrollo de parte de algunos gobernadores que Milei no avaló.
En la Casa Rosada mantuvieron la tesitura. Sólo avalaron sacar el punto de reforma electoral para incluir un punto sobre acuerdos básicos de educación. Era un pedido de algunos referentes de Cambiemos.
De esta manera, el texto final que Milei llevará como "intocable" a Tucumán contempla los siguientes puntos:
1. La inviolabilidad de la propiedad privada
2. El equilibrio fiscal innegociable
3. La reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del Producto Bruto Interno
4. Una educación inicial, primaria y secundaria útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar x
5. Una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos promueva el comercio
6. La rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual que padecen las provincias
7. El compromiso de las provincias argentinas de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país
8. Una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal
9. Una reforma previsional que le dé sostenibilidad al sistema y respete a quienes aportaron
10. La apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser protagonista del mercado global.
Principio de revelación
Bajo esta idea de "principio de revelación" y modo inflexible de Milei es que el Gobierno no está dispuesto a escuchar cambios y el presidente ya adelantó que mantendrá su plan económico.
"La Argentina está yendo a un programa completamente novedoso en materia de superávit fiscal, comercial, de cuenta corriente, y terminando de limpiar el problema de los pasivos del Central para terminar con la emisión para siempre. Hasta que los agentes se adecuen al nuevo escenario puede haber volatilidad. No es un problema", dijeron Milei y Luis Toto Caputo en la reunión de gabinete del martes para minimizar el impacto negativo de los mercados y la disparada del dólar blue.
Bajo esta tesitura de inamovilidad es que el presidente de dispone a avanzar en lo inmediato en un paquete de leyes relacionadas con cambios en materia de seguridad como la baja de la edad de imputabilidad de menores, la ley de juicio en ausencia, el paquete antinarcotráfico y la ley para sumar a los militares a la lucha contra los narcos.
A la vez, en la jefatura de Gabinete preparan el paquete de reforma electoral para la eliminación de la lista sábana y cambios en las elecciones internas para que nos sean obligatorias. Junto a esto se prepara el "plan anticasta" que había anunciado Milei y que contempla exigencia de elecciones en los gremios y la eliminación de jubilaciones de privilegio, entre otras cosas.
Milei prepara también como parte de esta "segunda etapa" los decretos reglamentarios de la ley Bases y el paquete fiscal además de la incorporación a pleno de Federico Sturzenegger con más reformas de fondo del Estado y en un futuro no lejano la eliminación del impuesto PAIS, y una nueva ola privatizadora.
Todo este esquema de "Milei inflexible" tiene una base de sustento en los sondeos que llegan al despacho presidencial. La última encuesta llevada adelante por DC Consultores detalló porcentajes que ilusionan al presidente Javier Milei en un contexto económico incierto tras la sanción de la Ley Bases.
Los datos de la consultora parecerían no haber afectado la valoración hacia la gestión presidencial. El 17,6% de los encuestados consideró que el Gobierno va "por buen camino" y el 42,8% aseguró que "de a poco se va encaminando". Los resultados se repiten en otros sondeos.