En qué recomienda invertir el Gurú del Blue: "Hay que estar cubierto..."
Pese a una semana positiva para el Gobierno, con la aprobación de la Ley Bases en el Senado, un dato de inflación que marcó una fuerte desaceleración en mayo y la luz verde del FMI para la octava revisión del acuerdo vigente, los mercados igualmente se movieron con cautela.
Tal como repasó El Cronista, la celebración del mercado no fue tan contundente como muchos esperaban y se limitó a subas más moderadas debido a las dudas que implanta el recorte del paquete fiscal en la Cámara Alta, las menores compras de reservas del Banco Central y, en menor medida, cuestionamientos sobre la eventual salida del cepo.
En este escenario, el analista financiero Salvador Di Stefano analizó el mercado de bonos en busca de la mejor inversión dentro del instrumento estrella tras la llegada de Javier Milei al poder, con crecimientos muy fuertes en los últimos meses pese a algunas correcciones a la baja.
En el último informe publicado en su sitio web, el titular de la consultora SDS marcó analizó tanto a los bonos en pesos CER como a los bonos en dólares: qué observa para los próximos meses.
El análisis de Salvador Di Stefano del mercado de bonos
El analista financiero Salvador Di Stefano compartió su análisis sobre el mercado de bonos y destacó que "en los últimos meses vemos que los bonos soberanos en dólares han venido creciendo en paridad", lo que implica "una mayor demanda de los inversores al observar que la argentina logra superávit fiscal y, de esta forma, puede honrar la deuda pública".
Por su parte, los bonos en pesos ajustados por inflación (CER) "parecen haber perdido el gran atractivo que tenían hace unos meses atrás", aunque el especialista insta a siempre tener en cuenta "cómo se mide la inversión".
Tras la fuerte rebaja de tasas de interés del BCRA, "los bonos dejaron de arbitrarse contra esta", dado que perdió relevancia. Ahora, estos instrumentos "comenzaron a descontar que el Banco Central implementará una política monetaria de competencia de monedas, con levantamiento del cepo y tasas positivas contra la inflación".
Por ende, el precio de los bonos "comenzó a ubicarse por debajo de su valor técnico, dando espacio a tasas de interés positivas".
Sin embargo, Di Stefano marca que, mientras el Gobierno no defina su política monetaria y cambiaria, tanto los bonos en dólares como los bonos en pesos ajustados por IPC "van a ajustar teniendo en cuenta una alta inflación en dólares que va a operar en la economía argentina".
Es por esto que el especialista insta al Banco Central a "explicitar" su estrategia tanto monetaria como cambiaria a futuro, ya que la incertidumbre actual respecto al cepo y una eventual dolarización mantiene "velo" sobre los mercados.
"Quedan muchas incógnitas por develar, pero es apasionante la competencia entre ambos títulos", se emocionó Di Stefano.
Ante este escenario de desconocimiento, el analista recomendó como estrategia final la diversificación: "Habrá que tener bonos en pesos ajustados por inflación y bonos en dólares, en ambos casos cortos y largos".
Para él, esta es "la mejor forma de lograr un equilibrio de lo que no sabemos que puede sobrevenir en Argentina: ¿dolarización? ¿competencia de monedas? ¿una nueva convertibilidad? ¿eliminación del Banco Central? Próximamente lo sabremos", consideró.
Por lo pronto, el "Gurú" recomienda optar por "el arbitraje de bonos cortos a largos" para quienes tienen estos instrumentos en dólares, estrategia que calificó como "atractiva".
E ilustró: "Se puede vender AL30 y comprar AL35, el bono más largo tiene menos para caer, y más para subir porcentualmente. Hay que estar cubierto para los dos lados".
Distinto es en el caso de los bonos CER en pesos, los cuales "no invitan al arbitraje, ya que la inflación en dólares podría ser muy elevada y los mantendría con tasas de retornos muy inferiores a los bonos en dólares".
En su lugar, Di Stefano observa "aproximaciones más importantes en los bonos en pesos ajustados por inflación y en dólares de más largo plazo" como, por ejemplo, "el bono DICP que vence en el año 2033 y comienza a pagar amortización y renta en junio del año 2024, el cual rinde inflación más 5,7% anual, mientras que un bono en dólares con vencimiento en el año 2035 rinde 18,0% anual".