Francisco, de la residencia de ancianos a la Audiencia de Toledo acusado de una estafa procesal a sus 91 años
En zapatillas de casa azules oscuras, con los pies amoratados y con dificultad para expresarse, a Francisco lo trajeron este martes desde su residencia de ancianos a la Audiencia Provincial de Toledo: 110 kilómetros de distancia . A sus 91 años, iban a juzgarlo junto con su hijo en la Sección Segunda como presunto autor de un delito de estafa procesal, en un asunto entre vecinos por una nave en el pequeño pueblo de Santa Ana de Pusa. «Me voy a dormir» , repitió varias veces este anciano antes de entrar en la sala de vistas con pasitos cortos. Читать дальше...