Dos de cada tres españoles compraría más por internet si el proceso de pago fuera más sencillo

Con la normalización del comercio electrónico los consumidores disponen ahora de un catálogo de productos que, aparte de más amplio, parece interminable. Ya sean artículos de moda, tecnológicos, mobiliario o incluso alimentos, lo cierto es que en los últimos años son cada vez más los que compran por Internet, bien por comodidad o por encontrar mejores ofertas, incluso permite ahorrar cientos de euros en combustible a los habitantes de las zonas rurales.

No obstante, a aquellos no familiarizados con la tecnología puede resultarles difícil entrar en el mundo del comercio electrónico. De hecho, más de seis de cada 10 consumidores reconocen que aumentarían sus compras online si el proceso de pago fuera más simple y fácil de entender. Así se extrae de un estudio realizado por Visa y Pecunpay (compañía de Minsait Payments), en colaboración con Ditrendia, en el que también descubrimos el 67% de los usuarios valora el pago con un solo clic ya que, en su opinión, combina seguridad y comodidad, dos de los aspectos más demandados por los consumidores digitales.

En este sentido, el director general de Visa en España, Eduardo Prieto, destaca que “la simplificación del proceso de compra no solo mejora la experiencia del usuario, sino que (...) puede ayudar a los comercios a incrementar su facturación”. Estas declaraciones se complementan con las del director general de Pecunpay, Enrique Álvarez, que pone al consumidor en el centro, por lo que “debemos estar alineados con sus expectativas para construir un ecosistema de pagos eficiente y cada vez más conectado a nivel global”.

Las tarjetas son, además, el método preferido por el 76% de los consumidores para realizar pagos internacionales, sobre todo porque así evaden el cambio de divisas. Mientras, en lo que al envío de dinero al extranjero respecta, las plataformas digitales y los neobancos se presentan como las opciones preferidas por un 62% de los usuarios, ya que, a su juicio, priorizan la rapidez, son transparentes en sus procesos y tienen comisiones reducidas, ventajas que no son suficientes para el 41% que todavía recurre a transferencias bancarias tradicionales.

El 95% utiliza la tarjeta en sus compras diarias

Aún así, a pesar del imparable avance del comercio electrónico, el físico continúa imponiéndose. Aquí, en las tiendas, las tarjetas también son el método de pago digital predominante: el 95% de los consumidores las utiliza en sus transacciones diarias, aunque el efectivo también sigue siendo relevante en compras más pequeñas o en mercados locales. Tener la oportunidad de elegir es un aspecto muy valorado por los consumidores, sobre todo en un momento en el que parece que el avance tecnológico amenaza a la existencia del dinero en metálico.

Pero para que la digitalización avance, tiene que hacerlo en todos los ámbitos, en el bancario también. En este contexto, la banca móvil se consolida como el canal más utilizado para operaciones bancarias, preferido por el 82% de los usuarios frente a otros que optan por la web (40%), los cajeros automáticos (34%) o las sucursales tradicionales (29%).

Además, el fenómeno de la multibancarización sigue en auge. Cada vez son más los consumidores que tienen cuentas en dos o más entidades, actualmente el 57% lo hace. Aquí, soluciones como el "open banking" ganan popularidad, con un 42% de usuarios que ya las utilizan para centralizar la gestión de sus finanzas en un mismo lugar.

Abandonar el carrito, práctica extendida

No simplificar los pagos provoca cientos de abandonos de carritos, lo que acaba perjudicando gravemente a los comercios. De hecho tres cuartas partes de los españoles abandonaron las compras por Internet en el momento del pago, bien por motivos de seguridad, por falta de opciones de pago o, simplemente, por olvidar los datos de la tarjeta.